5/26/2009

El Dr Ramiro Sombra

Se debatía internamente sobre el lugar donde realizaría la reunión. Pensaba que lo importante era reunirse con los que más quería. Pero estaba bastante advertido de que en realidad los que podría llegar a convocar para su reunión no eran solo los que él más quería, sino también , aquellos que por algún motivo se valían de su ubicación estratégica en lo que a contacto social se refiere.
Él era un consejal del pueblo de Pigué, un pequeño pueblo de la provincia de Buenos Aires. En ocasión de la renovación de su cargo por algunos años más, feliz por la victoria electoral, había decidido realizar una nueva reunión.
Convocó a su celebración a muchos familiares cercanos con los que tenía un trato cotidiano debido a la proximidad de sus viviendas. Invitó también a amigos del lugar con los que en su juventud solía pasar tiempo y hacer travesuras. Pero claro, además participó de la ocasión a varios funcionarios del partido y a unos cuantos de la opocisión que, por el tiempo que llevaba en política, había llegado a conocer muy de cerca. El Dr Ramiro Sombra era el mejor consejal que el pueblo había tenido en los últimos 20 años. Así le llegaba la opinión, según las encuestas, de los habitantes del lugar. Sus amigos y familiares se lo hacían saber cada vez que tuvieran la posibilidad, y él, en cambio, se preguntaba constantemente de qué manera poder hacer las cosas aún mejor. Tenía en cuenta las discusiones con sus colegas y sobre todo las conversaciones con sus adversarios políticos, quienes de diversas formas le hacían saber cuáles eran los puntos a corregir. Lo hacían sin saberlo, claro que no hubieran querido ayudarlo a hacer las cosas mejor si eso podría perjudicarles a ellos su propia carrera electoral. Pero el Dr Sombra había adquirido con los años la habilidad de captar lo que los demás le decían y hacer con eso una nueva estrategia, aún si lo que escuchaba fueran las más terribles críticas y las más obsenas observaciones.
Facundo Triesta, el líder opositor, le había comentado en una reunión anterior que los peones de algunas estancias se debatían fuertemente entre emitir su voto a comanda del patrón, lo que beneficiaría a Triesta o si en cambio y como dice la ley, aventurarse a sostener una posición individual en lo que a votación se refiere. Así fue lo que Triesta le dijo en aquella oportunidad al Dr Sombra. Éste, sin pensarlo demasiado, se dirigió a cada una de las estancias a sostener entrevistas con los distintos grupos de peones para preguntarles cuál era su opinión sobre las próximas elecciones. La mayoría de los grupos atinaron primero a no emitir opiniones que develaran su postura política respecto a los temas que eran de su interés. Algunos pudieron contarle sobre los temores que los aquejaban con solo pensar en no responder con su voto a la indicación de sus patrones. Triesta ya había estado en las estancias reuniéndose con los patrones. Al Dr Sombra se le ocurrió, sin que ningún opositor se lo dijera, organizar reuniones semanales durante los últimos 2 meses antes de las elecciones, en los que se enseñara y discutiera sobre los derechos y obligaciones que como trabajadores y como ciudadanos tenían.

Ni los estancieros, ni su opositor Triesta, estuvieron felices con esa iniciativa...

Continuará...

3 comentarios:

  1. estrategias...lugares..todo pareciera como si fuera una lucha?...
    como un lugar donde llegar pero no tranquilo..no conciente..
    Creo que no hay estrategia posible ...no se puede tener estancado el pensamiento ...no se puede no decidir..aquello que se tiene oculto o guardado como lo mas preciado para obtener un fin..no sienpre se esta ahi lo que se esta buscando...creo que el poder de hablar una y otra vez...es universal y ese poder que da ser prepresentante de un monton de ciudadanos sin lugar a duda hace creer que uno puede dominar tantas cabezas posibles!..error
    las iniciativas dan ese temor de lo nuevo..veremos que sucede.

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  2. Un político es alguién que trabaja para que sus ideas tengan representación en los hechos. Seguro que para conseguirlo, se las verá con la necesidad de hablarle a los que tienen la capacidad de otorgarle esa posibilidad. Los votantes, los ciudadanos. Eso podría ser la política.
    A veces la política no se juega en un plano electoral como para ganar unas elecciones. Se puede usar la política también en un plano ético, como para reorientar algunas cuestiones.

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  3. Y ahora salió De Angelis diciendo que ellos le tienen que decir a los empleados rurales a quien tienen que votar!!! No te lo dije?.

    Por suerte hay gente que piensa diferente.

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Dibujemos el garabato juntos!